La actual campaña 2024/25 ha traído una producción mundial récord de pistachos con cáscara: 1.167.800 toneladas, un 9,1% más que el año anterior, según el International Nut and Dried Fruit Council (INC). Este crecimiento global ha sido posible gracias a una cosecha excepcional en Turquía, que ha compensado las caídas registradas en Estados Unidos, principalmente, y también en Europa, en España e Italia.

Turquía alcanzó 415.500 toneladas, lo que representa un incremento del 130,8% frente a la campaña anterior. Se trata de un “año de carga” muy productivo para los pistacheros turcos, especialmente en el sureste del país, que ha tenido condiciones climáticas favorables. Esta producción ha hecho crecer también la demanda interna, un 40% más alta de lo habitual en los primeros meses de la campaña, impulsada en parte por el auge del chocolate con pistacho Dubái.

Estados Unidos, habitual líder mundial en producción, ha sufrido una caída del 25,7%, con 503.700 toneladas en esta campaña. Esta bajada se debe a su “año de descanso” dentro del ciclo productivo del pistacho, tal como recoge el USDA. Esta reducción también ha supuesto menores exportaciones globales, que se sitúan en 622.000 toneladas, un 2% menos que el año anterior.

Irán incrementó su producción en un 19%, alcanzando las 200.000 toneladas, aunque el calor extremo y la escasez de agua provocaron un tamaño menor de los frutos y un mayor porcentaje de pistachos cerrados.

Durante los primeros meses de 2025 (1 de enero al 6 de abril), la Unión Europea ha importado 44.368 toneladas de pistachos, un 7% más que en el mismo periodo del año anterior. El valor total alcanzó los 417,3 millones de euros, con un aumento del 28,3%, impulsado por los precios más altos.

Los principales orígenes de los pistachos importados por la UE han sido:

– EE. UU.: 39.261 t (+5%)

– Turquía: 1.650 t (+45,6%)

– Irán: 1.450 t (–46,3%)

Y los países que más importaron dentro de la UE fueron:

– Alemania: 16.920 t (+8,9%)

– Italia: 7.840 t (+58,4%)

– España: 6.870 t (+48,7%)